17 de Septiembre 2015
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La ciudad fue fundada por el rey Kuucumatz en el 1,400 y poco a poco fue conquistando los territorios vecinos. Setenta y cinco años después el reino quiché se había expandido hasta regiones del departamento de Huehuetenango, Nebaj (territorio del departamento de Quiché) y porciones de Baja Verapaz. Utatlán es la antigua capital de los maya Quiché.
Es la antigua capital de los maya quiché cuyo reino se constituyó a finales del período Post Clásico, dicha ciudad es llamada de tres maneras distintas, tanto Kumarcaaj, Gumarcaaj, y Utatlán.
Esta ciudad fue fundada por el rey Kuucumatz en el 1,400 y paulatinamente fue conquistando territorios vecinos. Para 1475 el reino de los quiché se había expandido ya hasta partes del departamento de Huehuetenango, Nebaj (territorio del departamento de Quiché) y porciones de Baja Verapaz.
El sitio arqueológico es un lugar aún considerado sagrado y constantemente visitado para realizar rituales mayas. Se ubica como es natural en la constumbre maya, en lo alto de un cerro, elevado sobre el resto del terreno para contar con ventaja ante invasiones.
Aunque en el lugar se han identificado numerosas estructuras, la mayoría se encuentra en forma de montículos enterrados y una excavación donde se evidencian escalinatas.
Destaca la construcción más alta llamada Templo de Tohil o dios del cielo. Esta se ubica en la plaza central custodiada por montículos. Esta estructura visible, constituída por roca, está oscurecida por el humo de los rituales mayas realizados al frente pues aún es visitada para ceremonias.
La cueva de Gumarcaaj
A pocos metros de este templo, descendiendo por un sendero se llega a una legendaria cueva que también es escenario de rituales mayas. Su longitud hacia el frente es de aproximados 80 metros y cuenta con pequeños túneles hacia los lados, mismos que tienen distinto largo uno del otro.
Es lo suficientemente alta como para caminar con erguida soltura. Sus paredes se encuentran ennegrecidas por los rituales que se realizan en su interior, que contiene casi constantemente velas y ofrendas. La cueva finaliza con una cruz que se encuentra ya destrozada y un último túnel hacia la izquierda.
Un túnel místico y protector
Su importancia no sólo es religiosa, se dice que fue refugio de mujeres y niños durante la invasión española. Cuentan que en su interior fue enterrada una princesa maya.
Algunos guías de la región cuentan a los turistas que en su interior se encuentra el ingreso a un sistema subterráneo largo y profundo. Leyenda quizás o dicho acceso fue sepultado durante algún movimiento telúrico, no se puede precisar. Actualmente la cueva solo muestra en su interior, hacia la derecha, un fozo de unos 3 metros de profundidad limitado por paredes en todos lus costados y que no lleva a ningún lado. Este es que dicen era ingreso a un sistema de túneles.
Lugar sagrado
Si se encuentra algún grupo de indígenas realizando rituales en la cueva, es preciso solicitar permiso antes de ingresar o esperar con respeto a que terminen su rito.
De igual manera se sugiere ser cauto y respetuoso antes de tomar fotografías, pues lejos de ser un centro de conmemoraciones tradicionales, el lugar es considerado sagrado y escenario de actividad mística. Se debe proceder con el respeto correspondiente.
Museo arqueológico
Al recién ingresar se divisa el museo de Gumarcaaj que contiene vestigios artesanías y detallados mapas con la distribución de las antiguas construcciones que permanecen como montículos.
Los trabajos de restauración han mostrado poco avance, permaneciendo casi todo el lugar como un hermoso bosque con una plaza de montículos y un solo templo enteramente visible, además de la cueva de Gumarcaaj.
Escenario del fin de los Quiché
Los quiché enfrentaron a los españoles durante la conquista y luego de perder una batalla contra ellos, misma donde pereciera Tecún Umán en 1524, invitan a Pedro de Alvarado a la ciudad de Gumarcaaj con intenciones de matarlo.
El plan terminó trágicamente cuando Pedro de Alvarado reunió a los cakchiqueles, enemigos de los quiché y luego de capturar a los caudillos de Utatlán, los quemaron vivos en su propia ciudad. Es así como Kumarcaaj permanece históricamente como el sitio donde finalizó el reinado de los quiché.
Cómo llegar a Utatlán
Se encuentra a pocos minutos del centro de Quiché, Santa Cruz, a donde se llega por medio de la Carretera CA1 luego de pasar por Chichicastenango.
Estando en gran cercanía al casco urbano, no cuenta con la señalización apropiada y se precisa consultar constantemente sobre cómo llegar para no perderse en la ciudad. La cercanía y acceso facilitan las visitas durante un mismo día desde regiones como La Antigua Guatemala, Panajachel (departamento de Sololá) e incluso Quetzaltenango.
Tanto Santa Cruz como Chichicastenango, en el departamento de Quiché, cuentan con variedad de hospedajes y hoteles para pernoctar, así como distintos restaurantes con comidas típicas.
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